Alejandro Rojas, uno de los socios que lidera Ren consultores conformó una empresa que se lleva en el corazón y hace parte de los líderes que inspiran. Nos llamó un día y nos dijó:
-Hola! Los vi en Shark tank y me encantaría comprar 400 Abrazadores con donación para mis colaboradores y clientes. Creo que un abrazo en estos tiempos es el mejor regalo y dar a otros lo multiplica-.
Empresas que se llevan en el corazón.
Así fue como Ren consultores se sumó a nuestra causa. Compró y donó 481 Abrazadores, nos acompañó a donarlos y recibió un par de charlas al respecto. Cada uno de sus colaboradores recibió un Abrazador como símbolo de fuerza y esperanza. Alejandro multiplicó el mensaje a sus socios y todos alineados con la causa fueron a entregar los Abrazadores ellos mismos. Compartiendo tiempo y viaje a Medellín para ayudar a que cada uno de los Abrazadores llegara a buen término con todo el corazón que caracteriza a estos 3 mosqueteros, con valentía apalancando con su fuerza, la de otros.
La donación
Con parte de estos recursos instalamos una emocionateca en el hospital mental en Medellín. Un salón donde las niñas del CP1, un centro de protección que ayuda a mejorar las condiciones físicas y mentales de niñas en condición de vulnerabilidad o protección, pueden liberar su tristeza, su rabia, aprender del miedo o estar tranquilas.
Corazones como el de Alejandro y sus socios, permiten que esta isla de estos pequeños seres que existen para abrazar, siga viva. Entiende el poder de lo simbólico, la fuerza de lo invisible. El poder del afecto como elemento que transforma el miedo o la rabia. Cinco personas de su empresa viajaron desde Bogotá a Medellín dos veces a entregar más de 300 Abrazadores e inaugurar una emocionateca. Empresas como estas dan ganan de montar empresa y ser de los líderes que inspiran. Uno de esos Abrazadores llegó a Don Amado en sus últimos días de sus 86 años. La alegría de Don Amado nunca se me va a olvidar. Juan Camilo y yo entramos a su cuarto a entregarle el Abrazador, además con una carta que uno de sus colaboradores le escribió a quien iba a recibir el Abrazador y nos dijo:
-Un Abrazador?! Hay tan bueno.
-Si Don Amado, y viene con un libro, dije yo pensando en la coincidencia de su nombre.
-Yo no puedo ver, dijo él con una pequeña sonrisa.
Juan Camilo, uno de los socios de Ren consultores me miró y le dijo:
-Don Amado, ¿quiere que le lea el libro?
A lo que Don Amado respondió con una sonrisa sobando su Abrazador que había llegado hasta él para honrar hasta su nombre yo salí del cuarto con lágrimas en los ojos y escuchando la voz de Juan Camilo diciendo:
-Había una vez un agujero lleno de soledad y tristeza… Apartandome del encuentro de dos corazones igual de bondadosos.
Gracias por la vida de los socios, todos los colaboradores y aliados de Ren consultores. Nos llena de alegría, inspiración y fuerza su existencia
