El libro del Abrazador

A muchos no nos enseñaron inteligencia emocional en el colegio.

Sabemos resolver ecuaciones, conocemos los elementos de la tabla periódica y a veces no sabemos como describir qué sentimos y porqué lo hacemos. 

En Hugger Island, sabemos que detrás de la violencia intrafamiliar, la aburrición, el abuso de poder o el maltrato se esconden tristezas no resueltas, rencores, miedo a dejar de ser amado o injusticias no aclaradas. 

Enseñar inteligencia emocional con nuestro libro.

Ese tipo de aprendizaje es el que queremos promover a través de nuestro personaje: un Abrazador. Un ser que existe para abrazar. Él nace en una isla donde viven aventuras que les ayudan, al final, a encontrar poderes nuevos que descubren superando el miedo o tomando decisiones que los convierten en valientes guerreros. 

Es así como quisimos que fuera este ser, sin ojos, orejas ni boca, quien enseñara trucos de magia para liberar aquellas emociones que a veces estorban, nos impulsan a gritar, decir cosas que no queremos decir y poner el lado oscuro por delante.

Y decimos magia porque para nosotros habla de transformaciones y de creer, creer en lo maravilloso que existe dentro de nosotros mismos. 

La naturaleza como maestra

Es así como en nuestro primer libro, un Abrazador descubre lo que ama recorriendo la isla y a sí mismo. Tollo es nuestro personaje principal, con la fuerza de la explosión que genera un montón de soledad y tristeza, nace, y así, sin saber quien es, raro y todo, comienza a caminar por aquella isla.

En su caminar se da cuenta de que cada Abrazador que conoce, tiene experiencias con la naturaleza que lo rodea.

Los Abrazadores

El Abrazador que nace en el mar se llama Cumbia, ama la brisa, las olas, se mueve con el viento y el ritmo de los tambores en el mar.  Cumbia le entrega los problemas al viento y al agua que fluye. Tiene una visión amplia del universo con aquel paisaje más grande que su transitar y así enseña a dejar ir como la personalidad de un ser que nace cerca al mar.

Macu es el Abrazador que le enseña las montañas y decide convertir las nubes y la lluvia en arcoíris, mostrándole el poder de la actitud. Macu hace de los días grises, días llenos de colores con una decisión.

Bonga, el Abrazador que vive en el bosque mágico, tiene la piel color escondite. Y con ella se camufla entre los árboles y las ramas, mostrando que detrás de muchas situaciones se esconden otras, como se esconde detrás de un duelo un montón de aprendizajes o recuerdos, o detrás del mal genio el cansancio o el miedo de perder a otros. 

Así Tollo, al final de nuestro primer libro, aprende de los otros lo que quiere y lo que no quiere para sí y descubre que él también quiere encontrar un lugar al que amar.  Así encuentra en la pradera de las flores su nombre y aprende todo el amor que más que tiene, es adentro. 

En nuestro primer libro se esconden pedacitos de magia en las palabras que todos podemos aplicar convirtiéndolos en trucos para saber liberar aquello que a veces no es tan fácil atravesar. 

Te invitamos a conocer nuestras historias.

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